A pesar de que las ventas orgánicas de los supermercados biológicos en Suiza aumentaron en aproximadamente un 50 por ciento el año pasado y los dos grandes minoristas de gama completa también aumentaron significativamente, el consumo de orgánicos sigue siendo un nicho de lujo. Asi lo expresa en un artículo Neue Zürcher Zeitung (NZZ, engl. New Journal of Zurich)

El autor del artículo sospecha que los comerciantes de alimentos trabajan con márgenes significativamente más altos en alimentos orgánicos que en alimentos convencionales y argumenta lo siguiente: La Oficina Federal Suiza de Agricultura (FOAG) ha estado comparando las diferencias de precios entre los alimentos convencionales y orgánicos todos los meses desde 2014. El ratio se ha mantenido igual a pesar del crecimiento de las ventas orgánicas.

“Con el tiempo y con una mayor demanda y mayores volúmenes de alimentos orgánicos, los productores y comerciantes deberían poder traspasar las ventajas de precio a los clientes”, cita la NZZ a un jefe de departamento de la empresa consultora Deloitte. Swiss Animal Protection también tiene su opinión: “Criticamos el hecho de que los precios de las etiquetas y los productos orgánicos no se calculan sobre la base de los costos reales, sino de acuerdo con la disposición a pagar que se puede eliminar en el mercado.

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